Últimamente, quien dice últimamente dice los últimos cuatro años, he escuchado mil veces las preguntas “¿Solo hablas tres idiomas?”, “¿Cómo se dice vituperio en inglés?”, “¿Cómo que no lo sabes?”, “¿Me puedes decir algo en alemán?”. Probablemente no tengan ningún tipo de maldad (al menos en el 90% de los casos) pero a veces nos ponen un poco nerviosos. Por ello he decidido escribir una pequeña carta (o email, o tweet super largo, o mensaje de Whatsapp tan largo que nadie lee) dedicada a todos aquellos que no conocen muy bien el trabajo de un traductor y se cruzan por primera vez (o no) con uno de nosotros.
Love,
Oli